Beneficios de la equinácea para tus defensas

Seguro que a estas alturas ya te has dado cuenta de que en Sawes somos muy fans de las soluciones naturales. Sin ir más lejos, aprovechamos las propiedades de las plantas y la fruta en la elaboración de nuestros caramelos suavizantes sin azúcar. Hoy te descubrimos los beneficios de la equinácea porque quizás no lo sepas pero esta planta es un perfecto despertador para nuestras defensas. Y, encima, nuestras pastillas balsámicas de equinácea están deliciosas, ¿las has probado?

Propiedades de la equinácea: todo lo que puede hacer para reforzar tus defensas

beneficios de la equinacea

Fueron los nativos americanos los primeros en darse cuenta del poder terapéutico de la equinácea, que usaban para calmar la fiebre y tratar heridas. A partir del siglo XIX, los colonos la introdujeron en Europa y su uso se extendió hasta convertirse en una de las plantas más empleadas en la medicina tradicional.

Hoy, sabemos que la equinácea estimula la producción de leucocitos, es decir, ayuda al buen funcionamiento del sistema inmunitario. Con unas defensas fuertes, nuestro cuerpo es capaz de protegerse por sí mismo frente a virus, bacterias, etcétera.

Otros beneficios de la equinácea: bye, bye resfriado

Además de ser un excelente activador para las defensas, a la equinácea se le atribuyen propiedades antibióticas, capaces de acabar con los síntomas más comunes del resfriado, como la fiebre, la mucosidad o la tos. En la misma línea, tiene importantes beneficios para tratar las enfermedades del aparato respiratorio, acelerando la recuperación de bronquitis, sinusitis o faringitis.

A mayores, entre los beneficios de la equinácea para la salud está que es un excelente calmante cuando se producen infecciones de oído, de encías o incluso infección de orina. También ayuda a calmar las migrañas.

Por otra parte, el uso tópico de la equinácea, es decir, como crema o apósito, ayuda a aliviar algunas patologías de la piel, como quemaduras, picaduras de insectos y heridas.